Aunque forman parte de un mismo alimento, analizando por separado el aporte calórico de la yema y el de la clara del huevo es notoria la diferencia, lo que lleva a concluir que una engorda más que la otra. ¿Mito o realidad?
¿Qué aporta mayor beneficio la clara o la yema de huevo?
Si bien la clara carece de grasa, la yema tiene a favor el ser más rica en proteínas, haciendo que el consumo de ambas partes sea adecuado y necesario, de hecho, los especialistas en nutrición coinciden en que lo más saludable es una ingesta completa del alimento pues cada parte cuenta con sus propios componentes.
De esta forma, lo importante es conocer el aporte nutricional de cada parte del huevo, en lugar de preocuparnos por el falso mito de su elevado índice de colesterol, ya que en su composición predomina la presencia de ácidos grasos insaturados, o lo que es igual, los ideales en el cuidado cardiovascular.
Beneficios de la clara de huevo
En términos de aporte calórico, la clara de huevo no contiene grasa en absoluto, por lo que las calorías que brinda son mínimas, de ahí que se considere la parte más saludable del huevo y la ideal para dietas que persiguen la pérdida de peso.
Además de contener menos calorías que la yema, la clara es rica en vitaminas del complejo B, proporcionando proteínas y un importante aporte vitamínico, sin apartar su efecto saciante especialmente, si se combina con alimentos como la avena.
Respecto al cuidado de la salud cardiovascular, reúne en su composición muchos péptidos, elementos clave en la reducción de la presión arterial.
Beneficios de la yema de huevo
Por su parte, la yema supera a la clara en el contenido de proteína; el problema –y la razón por la que se vincula a la parte que engorda del huevo– radica en que también es rica en grasa, conteniendo 4 gramos por unidad de los cuales 1,5 son saturadas, o lo que es igual negativas para la salud.
No obstante, el resto de las grasas es de tipo no saturadas, beneficiando al organismo.
En personas sanas, este índice de colesterol es bajo e inofensivo, mientras que en pacientes con descontrol, se aconseja la reducción del consumo pero nunca eliminarlo completamente de la dieta. Ahondando en su composición, la yema de huevo es:
- Buena fuente de minerales esenciales, tales como potasio, hierro, fósforo y magnesio.
- Reúne vitaminas A, E, B1, B2, B6, B9 y B12, además de figurar entre los pocos alimentos ricos en vitamina D.
- Contiene colina, sustancia que mejora el funcionamiento cerebral optimizando la memoria y su capacidad para luchar contra enfermedades degenerativas severas, entre ellas la demencia y el Alzheimer.
- Rica en lecitina, elemento que al sumarse al colesterol, previene su completa absorción, en simultáneo que nutre el cerebro, la médula ósea e hígado, adicional a mejorar la función cardiaca y del sistema nervioso.
Yema o clara, ¿cuál es la parte que más engorda?
Por tendencia, la creencia popular asocia a la yema con la parte del huevo que engorda, esto obedece a que la clara se compone principalmente de agua –aproximadamente el 88%– proteínas, minerales y una mínima porción de carbohidratos.
Sin embargo, diversos estudios científicos aseguran que la yema es la parte más nutritiva del huevo componiendose de vitaminas, minerales, proteínas y nutrientes esenciales.
Aun sumando más calorías respecto a la clara, la yema tiene la mitad de las proteínas y la riboflavina del huevo entero, además de vitaminas A, D, E, B6 y B12, zinc, hierro, fósforo, ácido fólico, tiamina y ácido pantoténico. Si no es suficiente, se suman la luteína y zeaxantina dos poderosos antioxidantes.