Una serie de variaciones de la dieta de jugo de tomate se puede encontrar en Internet, pero la premisa básica es la misma para todos ellos. El jugo debe ser consumido fresco y recién exprimido. Para su elaboración se recomienda utilizar agua pura o té de hierbas. El jugo de tomate en botella no se recomienda debido a que tiene muchos aditivos como el azúcar.
La dieta del jugo de tomate
La dieta a base de jugo de tomate no debe durar más de diez días. Una vez que se haya completado el lapso de tiempo, ya sea que se siga durante tres días o durante los diez días, es importante introducir alimentos sólidos de nuevo en la dieta poco a poco.
Al hacer esto, tómese el tiempo para saborear y disfrutar de cada mordida a medida que reintroduce otros alimentos a su dieta. Si toma decisiones saludables cuando comienza a comer alimentos sólidos nuevamente, aumenta sus posibilidades de seguir tomando decisiones más saludables.
Se recomienda por empezar ingiriendo otros jugos, sean de manzana o naranja por ejemplo. También es bueno añadir sopas de verduras, después batidos de frutas y finalmente galletas saladas para poder continuar con otros alimentos sólidos pero saludables.
Preparación de jugo de tomate
Los tomates están llenos de antioxidantes y nutrientes, incluyendo potasio, ácido fólico, hierro, vitamina C y vitamina A. Extremadamente versátil, estas frutas se pueden preparar y consumir de diferentes maneras, incluyendo jugo.
Cosas que se necesitarán son 3 tazas de tomate, una tabla de picar, cuchillo, 3 tallos de apio, una licuadora o procesador de alimentos, salsa picante, sal y pimienta negra al gusto.
Para empezar a preparar el jugo hay que lavar y quitar las semillas de 3 tazas de tomate, o aproximadamente seis tomates medianos a grandes. Una vez hecho esto hay que picar los tomates en trozos pequeños y medianos. Es bueno agregar apio a la mezcla para ello hay que lavar, quitar los extremos y las hojas de tres tallos de apio
Sea que se utilice una licuadora o un procesador de alimentos, tiene que usarse un recipiente lo suficientemente grande para la cantidad de tomate. Coloque los tomates y el apio juntos con un chorro de agua para proceder a encender el equipo. Se debe obtener una mezcla ni muy espesa ni muy liquida.
Vierta el jugo en una jarra. La mayoría de los exprimidores tienen un colector de pulpa, que le permite descartarlo fácilmente si lo desea. Agregue de dos a cuatro gotas de salsa tabasco, 1 cucharadita de Sal. Si es de su gusto añadir pimienta negra.
Se puede tomar de una vez, pero se recomienda ingerir fría porque mejora mucho su sabor. Enfriar el jugo en el refrigerador durante dos o tres horas antes de beber. Se le puede agragar más sabor a la mezcla con varios ingredientes finamente picados como ajo, cebolla, perejill fresco o albahaca. Igualmente se puede ayudar del procesador de alimentos o de la licuadora para picarlos.
Usted puede disfrutar de agregar el sabor de ajo recientemente picada, cebolla picada, perejil fresco o albahaca fresca a su jugo de tomate. Si es así, coloque estos ingredientes en el juicer con los tomates y el apio.
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